¿Qué puede hacer el psicoanálisis con lo que no anda del sexo?

PRESENTACIÓN DEL LIBRO: PSICOANÁLISIS, DROGAS & ROCK AND ROLL de Luis Darío Salamone en la EOL Sección La Plata. 31 de agosto de 2023

Yasmina Romano

En primer lugar, quiero decir que es para mí una alegría inmensa participar en esta mesa en el marco de la actividad que da inicio al TyA La Plata.
Junto a Eduardo Suárez miembro de la EOL y la AMP y al periodista de rock Leo Hueso. Y con la grata presencia del autor Luis Darío Salamone, uno de los Directores de la Red Nacional TyA, quien demás, junto a Ernesto Sinatra, nos ha acompañado y orientado en este recorrido realizado cuando éramos aun un grupo en formación.
Agradezco además a mis compañeros del TyA La Plata –todavía no me acostumbro a decirlo– por proponerme participar de esta mesa y a Christian Ríos, tractorcito que avanzó tranquilo, seguro y sin pausa en el trabajo e investigación sobre el tema que nos interpela: el abordaje de –como diría Mauricio Tarrab en las Jornadas Nacionales del TyA de abril de este año–- ya no solo la clínica de las toxicomanías y alcoholismo– sino la clínica de los desenganches del Otro. Puesto que como lo dice Luis en la página 93 de este libro: Toda práctica que conlleva un goce puede resultar adictiva.
Lo primero que me inspira una lectura de este libro es su título: Psicoanálisis, drogas y Rock and Roll porque parafrasea la consigna los `70 “Sexo Drogas y Rock and Roll” del músico inglés Ian Dury. Solo que Luis a la palabra sexo la reemplaza por la de psicoanálisis. Comencé a leer el libro con esta pregunta, ¿por qué reemplazó la palabra sexo por psicoanálisis? Hipoteticé algunas respuestas en mi cabeza, pero quería ver qué extraía de su lectura, entré a este libro con esa pregunta.
Sabemos que para Lacan “No hay relación sexual”, que no quiere decir que no las haya, sino que siempre son problemáticas, falladas o estragantes, complicadas, desarregladas, en el mejor de los casos sintomáticas. Pero ¿el psicoanálisis arregla esto? ¿Por qué psicoanálisis, está en el lugar de sexo, en este título? ¿Qué puede hacer el psicoanálisis con lo que no anda del sexo?
Si continúan mirando la tapa hacia abajo, encontraran una lista de CD de distintos músicos del rock y el pop internacional que adelanta sobre que versará este libro: Kurt Cobain, Syd Barrett, Keith Richards, Phil Collins, Michael Jackson.
Tomaré este hilo para hacer la presentación, pero como dice Ricardo Piglia, hay tantas versiones de un libro como lectores. Cada uno seguirá su hilo.
Luis que es un ¿adicto a la lectura? o un ávido lector presenta cada músico luego de haber leído por gusto varias biografías, autobiografías y diarios personales de cada músico. Y como Freud con las Memorias de un enfermo nervioso, de Daniel Paul Schreber, realiza una lectura psicoanalítica a partir de estos testimonios que como aclara él mismo en la contratapa, “se desliza entre el terreo del rock and roll (o el pop) y el psicoanálisis. Sin forzamientos, sin interpretacionismos, sin pretensiones diagnósticas”.
Como les decía, cada lector tomará su hilo, la de deducir un diagnóstico de estructura podría ser uno, otro podría ser el de tomar nota de la función que para cada músico han tenido las diversas sustancias en su economía libidinal, otro puede ser la sublimación, o el cuerpo en las toxicomanías. Dependerá del color del vidrio por el que lea el lector.
Volviendo al mío cito algunos párrafos que encontré en relación a este asunto, sin nombrar a los músicos así los completan ustedes:
“El joven … se plantea que no se iría de este mundo sin saber lo que era acostarse con alguien. Entonces un día salió del instituto, fue directo a la casa de ella, se sentó en su regazo y le dijo “vamos a coger”. Ella se metió en el cuarto con la puerta abierta y se desnudó, mientras él la contemplaba. No sabía bien qué tenía que hacer, procuró hacer lo que pudo. Ella lo tranquilizó, le dijo que lo había hecho muchas veces con su primo. Pero cuando llegó el momento de máximo acercamiento a …. le dio asco el olor de la vagina y su transpiración, y se marchó. El asco apareció como una respuesta sintomática ante el encuentro sexual fallido”. (1) […] “En esa época se encuentra con la falla de la relación sexual pero también con la falla del consumo como solución y tuvo un primer intento de suicidio. ¿Qué habría pasado si en ese momento hubiera sido escuchado por un psicoanalista?” (2)
Otro recorte:
“… el gran problema fue Anita, cuando se separaron, X perdió el control de su vida. El hombre que despachaba mujeres con seis hijos ilegítimos, se volvió loco por una mujer. Ya no lograba tener para él la función de síntoma, no podía anudarlo, era demasiado volátil. X se descontroló con las drogas. “Esta quemado- dijo Keith- el problema es que hacer con él.
No caben dudas de que Anita sabía aparecer como causa de deseo, podría haber sido un excelente síntoma, si además de no trastornarlo con los celos le hubiera puesto algún freno al goce; pero si se convierte en parte de aquello que lo empuja al sujeto al goce, no cumple el papel de síntoma, sino que da lugar al accionar del superyó”. (3)
Y hablando de partenaire, no solo una mujer puede serlo: “Keith Richards dirá esto de la relación (con Jagger): Es una amistad verdadera, en la que puedes darle un porrazo a la cabeza al otro sin que te diga ya no eres mi amigo. Soportas la neurosis del otro. Él es mi mujer y él te dirá lo mismo de mí”. (4)
Otro recorte:
“Y dio nombre y existencia a una de las bandas más grandes de la historia del rock, propuso que se llamara Pink Floyd Soundn en homenaje a dos músicos: Pink Anderson y Floyd Council. La operación que realizó en la creación del nombre de la banda ya nos habla de su inventiva”, (5) dice Luis. “[…] formó parte de su propia invención solamente tres años. Pero su estela jamás dejó de estar presente en la historia del grupo”. (6)
En una de sus letras escribe sobre fetichismo y travestismo. “Estas prácticas del ropaje se juegan en muchas oportunidades a partir de que el sujeto no dispone del significante fálico, punto de anclaje que sirve de identificación y le permite, a un hombre o a una mujer, considerarse como tales.”
“Con respecto a las mujeres, su última pareja estable fue Gayla Pinion. La relación se tornó insostenible por los celos de Y. Llegaron a pensar en la posibilidad de casarse. Se comprometieron en octubre de 1970. Pero en el festejo de compromiso a Y se le ocurrió tirar la sopa de tomate sobre Gayla, desapareció de la reunión y volvió rapado”. (7)
“Luego de una internación por una severa crisis nerviosa que no estaba asociada al consumo de drogas ni alcohol, su hermana dice: No lo atendieron lo suficiente, no le dieron sedación ni tratamiento, ni había nadie que lo escuchara, solo lo mandaron a su casa. […] creo que él quería hacer terapias con arte. Necesitaba hablar”. (8)
Luis compara el genio de Syd Barret con el de Joyce y el de Dalí, pero a diferencia de ellos, dice, él no contó con una mujer que pudiera operar como síntoma.
Podría seguir con los que fueron mis capítulos preferidos del libro: Phil Collins y Michael Jackson, respecto a la relación entre el consumo y lo que no anda de la relación sexual, pero me detengo aquí, no sin antes recordar que Lacan en El Seminario 16 dice que el Otro es el cuerpo y no siempre anda bien esa relación.
“¿qué es la sexualidad? ¿Qué es el Otro sexual, si el partenaire esencial del sujeto es el objeto a, es decir algo de su goce?” (9) dice JAM en “La Teoría del partenaire”.
Para concluir y para invitarlos a la lectura de Psicoanálisis drogas y rock and roll, les aseguro que sumergirse en este libro es una satisfacción, que pueden ir acompañando de otras, por ejemplo, Spotify –porque no creo que cuenten con la colección de discos de Luis – o por la que se le ocurra a cada uno.
¡Buena lectura!

Notas

(1) Salamone, L.D.: Psicoanálisis, drogas y Rock and roll, Ed. La llave de Mandala, Buenos Aires, 2023, p. 32.
(2) Ibíd.
(3) Ibíd. p. 79.
(4) Ibíd. p. 108.
(5) Ibíd. p.118.
(6) Ibíd. p.119.
(7) Ibíd. p.151.
(8) Ibíd. p.157.
(9) Miller J.-A.:“La teoría del partenaire”, Revista Lacaniana, Número 19, Grama, Buenos Aires, 2015, p.46.