Poner el acento en los modos de decir.

A CIELO ABIERTO. Segunda noche de carteles. 14 de julio 2023

Verónica Escudero

  1. El cartel
    Agradezco la invitación de la Secretaría de carteles a participar de la mesa de esta Segunda Noche de Carteles. “A cielo abierto”, fue la propuesta, que es también el modo que Lacan nos propone compartir el trabajo de los carteles. El trabajo y sus crisis de trabajo, también.
    El cartel del que formo parte se llama “Transferencia: enigmas de la entrada” (1). Es un cartel fulgurante compuesto para el próximo XI Enapol. (Encuentro americano de psicoanálisis de la orientación lacaniana). La respuesta afirmativa del más-uno frente a nuestra invitación, fue de entrada una provocación: “escriban fulgurantemente lo que les interesa trabajar”. Allí también hubo algo a “cielo abierto”.
    Me apoyé en dos cuestiones:
    Una, en el argumento de Enapol, en el párrafo que dice que la práctica hoy se encuentra con los desbordes y los excesos propios de las disrupciones de goce. En este punto, si estas no se transforman en una pregunta esencial para el ser hablante, ¿abrirían per se a una experiencia de análisis? […] ¿Cómo se posiciona un analista en el primer encuentro con sujetos cada vez más reactivos al inconsciente y más perturbados por el goce del cuerpo? (2)
    La otra, es un interrogante clínico que insiste para mi desde fines del aislamiento, a propósito de algunas presentaciones de adolescentes: inhibiciones, liquidez de identificaciones sexuales, perturbaciones en la imagen del cuerpo, prácticas de entrenamiento, cambios en las dietas alimenticias, etc…intentos de arreglárselas con un cuerpo a solas, que no los dejan exentos de cierta angustia; y a su vez modalidades discursivas que no abren una pregunta al Otro.
    Entonces ¿cómo comienzan los análisis en estas coordenadas?, o incluso más radical podría formularlo ¿por qué consultan?
  2. El rasgo
    El rasgo con el cual me inscribo en el cartel tiene una pregunta. Deseo del analista y SsS ¿son distintas operaciones? Cómo conviene pensar la operación por la cual algo de la transferencia pueda instalarse. El caso de un joven cuya inhibición y clima melancolizado de los primeros meses de entrevistas virtuales, evidenciaba una gran dificultad para tomar la palabra. Sin embargo, la regularidad de los encuentros, a los que consintió semana a semana, fue abriendo un lugar posible para que allí algo “se diga”.
  3. La opacidad del Sujeto supuesto Saber
    Encuentro una referencia de Miller donde plantea cierta “opacidad” del Sujeto supuesto saber…lo cito: “Comenté esa fórmula (3) con frecuencia. Aunque conserva la opacidad suficiente para volver a examinarla, aislar sus motivaciones y, me atrevería a decir, sus límites”.(4)
    Allí sitúa que lo que Lacan encontró en el resorte del Sujeto supuesto saber es “un concepto muy complejo y muy expresivo a la vez para todo el mundo, sobre todo el término suposición. Se comprende bien que no hay certeza, que hay un hecho de creencia, o al menos un hecho de confianza y una relación de garantía” […] “Con esta invención de Lacan, del sujeto supuesto saber, se pone por el contrario el acento en el modo de decir, y se funda el análisis no en la repetición libidinal sino en la relación del sujeto con la palabra”.(5)
    Recorto de allí que es “necesario un hecho de creencia, o al menos de confianza y garantía”…es decir si no hay creencia en el Sujeto supuesto saber, entonces puede haber un “hecho de confianza y una relación de garantía” ¿con el analista? Por otro lado, me quedo con la cuestión de “poner el acento en el modo de decir” como orientación a la relación del sujeto con la palabra. Lo que nos permitiría ubicar la manera en que cada uno “junta”, o no, significante y cuerpo.
  4. Posición del analista. Consentimiento al decir
    En Causa y consentimiento Miller señala que hay distintas modalidades de asentimiento subjetivo, en términos de pensar la relación del sujeto con la palabra. Pero para cualquiera de ellas es necesario que en algún lugar haya un “si” fundamental. Un “si” es una acogida, un consentimiento del sujeto a la estructura, aunque pueda tener distintas modalidades. Una primera orientación del sujeto –de creencia, de aversión, de atracción o compulsión– respecto de la Cosa, donde se liga de manera primordial el afecto y el consentimiento. “La bejahung freudiana, implica ese si (ja) fundamental, entonces habrá un posible “si” o un posible “no”, las distintas declinaciones del asentimiento.
    Miller nos recuerda ahí, justamente en un capítulo que se llama “el si y el no”, que para abordar el oscuro problema del consentimiento “hay que tomar un desvío por la posición del analista, que de entrada es una posición de acogida”.(6) En el decir que si o decir que no, hay mas que la mera presencia o ausencia, hay el “decir que” que determina la existencia del sujeto.
    Esto me hace preguntar si la posición del analista “como acogida”, como ese “si” fundamental –la behajung–, nos permite abrir un lugar para hacer la apuesta de provocar la existencia de un sujeto a partir de un decir posible.

Notas
(1) Cartel: Veronica Di batista, Valeria Gabrielloni, Rosana Salvatori y yo como cartelizantes, más uno: Ricardo Seldes.
(2) Argumento de XI Enapol 2023 “Empezar a analizarse”, en https://enapol.com/xi/argumento-y-ejes
(3) Hace referencia a la fórmula del algoritmo de la transferencia específicamente.
(4) Miller, J.-A.: “¿Cómo comienzan los análisis?”, texto de orientación del XI Enapol, en https://enapol.com/xi/orientacion/
(5) Miller, J.-A.: Ibid.