Valeria Martínez
Segunda Noche de Carteles EOL Sección La Plata
“La enseñanza del psicoanálisis solo puede transmitirse de un sujeto a otro por las vías de una trasferencia de trabajo” (1). Así lo anuncia Lacan en su Acto de Fundación en 1964. Para la elaboración del trabajo de Escuela Lacan propone el principio de una elaboración sostenida en el cartel, al que define como ese pequeño grupo constituido por elección mutua, que no implica jerarquía sino una organización circular y cuya elaboración será un trabajo en torno a un saber que se construye alrededor de un vacío.
La enseñanza del psicoanálisis se trata entonces de una transmisión. Y esa transmisión, es una transmisión particular. Es, nos dice Miller, una transmisión por recurrencia, de uno a otro, no a una masa de otros, sino de uno a uno. Una transmisión que se realiza vía cierto tipo de transferencia que es la transferencia de trabajo, es esa transmisión de un sujeto a otro.
La transferencia de trabajo entonces se refiere al modo de transmisión de la enseñanza del psicoanálisis. De uno en uno y, por tanto, es necesario pasar por allí, hacer esa experiencia.
¿Qué es lo que se transfiere de uno a otro en la transferencia de trabajo? Se transmite el trabajo. No basta con transferir los resultados, las conclusiones, los contenidos, sino que Lacan sostenía que ante todo quería transferir un estilo de trabajo. El gusto por el trabajo, en palabras de Miller, quien contó, ante la pregunta de Miquel Bassols sobre la transferencia de trabajo este año en la presentación del libro Polémica Política, que él vio en Lacan, no al gurú que le presentaban, al hombre mundano, sino al hombre que trabajaba todo el tiempo, seriamente. pero con alegría, “pensé que era una manera de vivir muy valiosa y me inspiró respeto y gusto de hacer como él”.
“La orientación es la transferencia de trabajo” (2) dice Miquel Bassols tomando de Miller la idea de la orientación, como otro de los nombres que puede llevar la transferencia de trabajo. Esta orientación nos dice Bassols, es la transferencia recíproca. La transferencia de trabajo supone necesariamente, nos dice una reciprocidad, incluyendo la de la crítica rigurosa y aclarando que la transferencia no es nunca recíproca en la experiencia del análisis y que solo puede serlo en la experiencia de la Escuela, y es una transferencia fundada en una crítica recíproca. Allí pone el acento: «ningún desprecio por la producción de cada uno, una crítica recíproca, lo más seria posible de la producción de cada uno, más allá de las identificaciones, supuestas en el uno o en el otro” (3)
Esto me hizo recordar que Miller al final de “Política lacaniana” hace referencia al respeto diciendo que “uno de los nombres de la relación con el Otro es respetar en el Otro otra cosa que su imagen, respetar su diferencia, su incomparabilidad” (4).
Heterogéneo, dispar, convocadas por el cuerpo, impulsadas por el deseo, sosteniendo y haciendo circular interrogantes, cuestionamientos, descubrimientos, hallazgos, referencias de textos y no saberes individuales, así se armó y así transcurrió este cartel.
La elaboración del trabajo sucedió alrededor de ese vacío de saber sostenido, un no todo saber, un Otro que no sabe, y que por tanto nos posibilito construir.
Ese vacío fue eficaz generando en mí transformaciones a lo largo de la experiencia en este cartel. No salgo de la misma manera en la que entre.
Hubo un producto, un producto escrito, un trabajo que fue enviado a “El banquete de carteles 2020”.
Y hubo también un saldo. A lo largo de nuestras reuniones me fui encontrando con otros dichos, otros saberes, otros recorridos, escuchar eso que mis compañeras decían, sus lecturas, sus dudas, sus conclusiones, tuvo un efecto en relación al saber que portaba. Algo se conmovió, mi relación con ese pequeño saber asegurado se perturbo. Una pregunta irrumpió. ¿Y entonces cómo es? ¿Cómo es esta cuestión de lalengua? ¿Es traumática, no es traumática? ¿Mortifica, vivifica? Surgió algo que no estaba. Apareció, a modo de interrogante, un cambio en relación a eso que creía saber. Ese es para mí el saldo de este cartel. Saldo a favor. Que me lo llevo. Saldo que sostiene el deseo de saber y relanza el trabajo, hacia otro cartel tal vez. Será distinto, será otro espacio, otro tiempo, será con otros, será otro rasgo, otro más uno. Pero permanecerá la orientación, el entusiasmo y gusto por el trabajo.
Notas
(1) Lacan, J., “Acta de fundación”, en Otros escritos. Paidós, Buenos Aires, 1946/2012
(2) Bassols, M. “La orientación es la transferencia de trabajo”. Boletín n°2 de la VI Jornada de Elucidación de Escuela. .
https://ne-np.facebook.com/Escuela.Lacaniana.de.Psicoanalisis/posts/1739385936243164/ 2021
(3) Ibíd.
(4) Miller, J-A. Política Lacaniana. Diva. Buenos Aires. 2017.