Resonancias de “Disrupción del goce en las locuras bajo transferencia” en el Congreso de la AMP 2018

ECO DEL XI CONGRESO DE LA ASOCIACIÓN MUNDIAL DE PSICOANÁLISIS: LAS PSICOSIS ORDINARIAS Y LAS OTRAS, BAJO TRANSFERENCIA –Barcelona, 2 al 6 de abril de 2018

 

 

 

Carlos Jurado                          

 

En la conferencia dictada por Eric Laurent “Disrupción del goce en las locuras bajo transferencia” (1), varias cuestiones que escuché me impactaron fuertemente; al poder leerla días después el impacto fue aún mayor.

Al comentar una cita del “Seminario 24”, de Lacan: “Pero ¿anular es negar? El análisis, propiamente hablando, enuncia que el Otro no es nada sino esa duplicidad. Hay lo Uno, pero no hay nada de Otro” (2). Ubica allí la ruptura entre el Ser y lo que hay, marcando la diferencia entre lo que sería del campo de la ontología con el campo de la ex-sistencia, ruptura que Jacques-Alain Miller trabaja en extenso en su último curso y que tiene consecuencias fecundas a nivel de la experiencia clínica.

Continúa Laurent con su comentario y dice que “hay que separar el Uno y el diálogo. El Uno puede dialogar completamente solo”. Siguiendo este desarrollo podemos sostener que el Uno no pertenece a un discurso, que pertenece a lalangue y afecta a un cuerpo que goza y en principio nada hace pensar que se dirija al Otro, por eso hay Uno, pero no hay Otro. Este camino marcado por esas lecturas lleva a poner en cuestión al Sujeto supuesto Saber, ¿cómo pensar al sujeto si el Uno no se articula al S2? El saber deja de ser supuesto para estar contenido en el Uno, ¿es decir que también cambiaría el estatuto del saber? Entonces surge un interrogante, cómo se da la experiencia analítica “sino no hay comunidad entre el analista y el analizante.”

¿Cómo calibrar la cuestión del Uno extraído del par significante? El Uno que no recibe el saber en forma invertida –como lo pensábamos clásicamente en la articulación de la cadena significante– nos ayuda a pensar la frase del Lacan de El seminario, libro 20, Aun (3), cuando decía que el S2 es elucubración de saber sobre lalangue, el saber elucubrado por el inconsciente es el que invisibiliza al S1 desarticulado y que toma tanta relevancia en el último tramo de la enseñanza de Lacan.

“Uno lo sabe, uno mismo” es una frase del último texto escrito por Lacan, “Prefacio a la edición inglesa del Seminario 11” (4), que se puede entender con la conferencia de Laurent y con El ultimísmo Lacan (5) e J.-A. Miller. Allí encontramos que el inconsciente freudiano y el inconsciente transferencial suponen el lazo entre los significantes, en tanto que el sujeto y el saber son dos supuestos, consecuencia y efecto de la cadena significante que se encuentran negados por la frase “Uno lo sabe. Uno mismo” que rompe la conexión transferencial y abre al espacio de un lapsus. “Este uno que sabe que aquello no tiene ni pies ni cabeza, ni sentido ni interpretación” (6). Y agrega “Tenemos acá un uno que es un sí mismo. Lo que extraigo de estas palabras es que se trata de un saber del sí mismo solo”. (7)

 

 

 

Notas:

(1) Laurent, E. “Disrupción del goce en las locuras bajo transferencia”, XI Congreso de la AMP, (Traducción no revisada por el autor en: https://psicoanalisislacaniano.com/disrupcion-del-goce-en-las-locuras-bajo-transferencia/) Barcelona, 2018.

(2) Lacan, J.: “Seminario 24”, Clase 12: “Lo imposible de aprender”, inédito, 1977.

(3) Lacan, J.: El Seminario, libro 20, Aun, Paidós, Buenos Aires, 2008.

(4) Lacan, J.: “Prefacio a la edición inglesa del Seminario 11”, Otros Escritos, Paidós, Buenos Aires, 2012, pág. 599

(5) Miller, J.-A.: El ultimísimo Lacan, Paidós, Buenos Aires, 2013.

(6) Ibid., pág. 13

(7) Óp. Cit. n°5, pág. 15.